Para conseguir el ángulo de picado necesario hemos calzado el motor con una tuerca colocada en la parte de atrás, esto es provisional , haremos una cuña de plástico o madera dura, con el ángulo definitivo.
Los tornillos de fijación son del tipo rosca chapa.

El receptor va colocado entre la bancada de los servos y el depósito bien envuelto en nuestro plástico de burbujas y encajado en su lugar.

El interruptor se maneja desde fuera con un alambre que sale al exterior.

Las ruedas van sujetas por ambos lados con prisioneros metálicos, los hemos soldado con estaño, una rueda es una rueda. Ojo que las llantas se derriten, si no sabeis soldar rápido y bien utilizar los tornillos de los prisioneros.

El centro de gravedad se debe situar teóricamente entre el 25 % y el 33 % de la cuerda, ello implica una distancia de entre 75 y 100 mm. medidos desde el borde de ataque.
Colocad delante del depósito el lastre que necesite, un centro de gravedad retrasado puede ser desastroso.
El protototipo vuela perfecto con el centro de gravedad bajo los tornillos (11,5 cm) del borde de ataque. No obstante comenzad con el centro de gravedad lo mas adelantado posible, es más seguro, luego se puede ir atrasando poco a poco.

Las escuadras de mando están hechas con un tornillo de M3, dos arandelas, una tuerca y la pieza de conexión de plástico, es una opción, se pueden usar escuadras convencionales. Regular el mando de elevador para ± 20 mm. y el de dirección para ± 30 mm. en la parte mas ancha.

En la cola se puede colocar un patín de plástico para absorber los roces de los aterrizajes perfectos, con esto y unas pegatinas sabiamente distribuidas damos por terminado nuestro super-entrenador nivel cero, desde el plano hasta el aire.
Las pruebas de vuelo os las contaremos dentro de una semana si la meteorología es favorable.